Qué es el procedimiento parlamentario
El procedimiento parlamentario es la herramienta para mantener el orden en las reuniones y asegurar un proceso democrático que satisfaga a todas las partes. Es utilizado en muchísimas organizaciones y la importancia es tanta que contratan parlamentaristas profesionales para procurar que se respeten estos procesos.
Hay organizaciones que, aunque necesitan urgentemente del procedimiento parlamentario, desconocen su utilidad, modos de implementarlo o hasta su existencia.
En este artículo, explicamos de forma breve y sencilla qué es el procedimiento parlamentario, su buen uso y ventajas de utilizarlo.
¿Qué es el procedimiento parlamentario?
En pocas palabras el procedimiento parlamentario es un conjunto de reglas de orden y conducta. Estas reglas establecen unos pasos a seguir y la forma de hacerlo. Por ejemplo, un principio del procedimiento parlamentario dice que se atiende un asunto a la vez. Siguiendo este principio evitamos confundirnos con otros temas y, si se trata de introducir un asunto ajeno, se le declara fuera de orden. En resumen, son las reglas del juego.
El procedimiento parlamentario también se conoce como reglas parlamentarias, leyes parlamentarias, derecho parlamentario, reglas de orden o reglas de asamblea.
¿Qué ventajas tiene utilizar el procedimiento parlamentario?
Es un método para que todos sean escuchados y se tomen decisiones sin confusión. Permite la participación, ahorra tiempo, facilita la toma de decisiones de grupo, asegura un trato justo y legitima los procesos deliberativos.
El procedimiento parlamentario no te garantiza que la reunión va a ser corta, pero sí te permite que su duración sea menor que cuando no se utiliza.
¿Cuándo es recomendable utilizarlo?
Es muy recomendable cuando la reunión se trate de un grupo numeroso o de un grupo o tema conflictivo. También se debe utilizar si hay preocupación por la legitimidad de los procesos o la necesidad de conducir deliberaciones en orden y rápidamente. De todos modos, es conveniente usarlo siempre. Sin embargo, si las situaciones expuestas no están presentes, se puede hacer de manera más flexible.
¿Quiénes utilizan el procedimiento parlamentario?
Todo tipo de organización que celebre reuniones o asambleas puede utilizarlo. Por ejemplo, asociaciones, corporaciones, uniones, sindicatos, cooperativas, condominios, otros complejos de vivienda, iglesias, clubes, etc.
¿Qué hace un parlamentarista?
El parlamentarista tiene la función de proveer asesoría sobre todos los procedimientos de la reunión. Su participación puede ser tan limitada o extensa como se le permita. Por ejemplo, se puede contratar a un parlamentarista para que aclare cualquier duda, si la hubiera. En este caso extremo, el parlamentarista estará presente y hablará cuando se le requiera. En el otro extremo, se puede contratar a un parlamentarista que maneje completamente la asamblea, es decir, que mantenga la presidencia pro-tempore.
Lo más común es que se le requiera un rol intermedio entre esos dos extremos. Por ejemplo, el presidente puede dirigir la asamblea teniendo a su lado en consulta permanente al parlamentarista. Cuando haya un debate, se le solicita al parlamentarista que lleve el orden correspondiente.
¿A quién responde el parlamentarista?
El parlamentarista debe ser de la confianza del presidente, ya que es a quien prestará principal asesoramiento. Sin embargo, el parlamentarista también se debe a la asamblea, pues la asiste y orienta sobre cualquier asunto parlamentario.
En ocasiones se ha confundido la función del parlamentarista con la de un abogado. Esta es una comparación errónea, ya que el abogado debe buscar la manera de defender a su cliente a toda costa. En todo caso, la función de un parlamentarista es más parecida a la de un juez, ya que su rol debe ser imparcial. Su función es asegurar que los procedimientos sigan el orden parlamentario logrando un trato justo para todos.
¿Qué otras funciones realiza un parlamentarista profesional?
Un parlamentarista profesional puede ejecutar diversas funciones, entre ellas:
- Asesoría en la asamblea o reuniones de cuerpos directivos
- Consultor de procesos específicos como elecciones o decisiones de gran importancia en una asamblea
- Proveer opinión parlamentaria formal y escrita sobre algún asunto
- Ofrecer cursos, talleres y seminarios sobre temas afines a los procedimientos
- Revisar reglamentos y asistir en el proceso de enmiendas y aprobación
- Presentar sugerencias y estrategias de acción sobre los procesos a realizarse en una asamblea o reunión
- Ayudar en la coordinación previa de una asamblea o reunión, lo cual facilita los procesos y tiende a ser la clave de reuniones exitosas
¿Qué credenciales debe tener un parlamentarista?
La profesión de parlamentarista no está reglamentada por ninguna ley en Puerto Rico o Estados Unidos. Por lo tanto, no hay una certificación legal que avale o garantice la habilidad y preparación de un parlamentarista. De hecho, muchos de los más reconocidos autores de libros parlamentarios que ahora son considerados autoridades parlamentarias no estaban certificados por ninguna entidad. Su rol como parlamentaristas profesionales fue reconocido en base a su experiencia y capacidad.
Existen asociaciones que pretenden dar un carácter oficial a la profesión mediante evaluaciones y certificaciones. En Estados Unidos encontramos la National Association of Parliamentarians y el American Institute of Parliamentarians. En Puerto Rico está la Asociación de Parlamentaristas de Puerto Rico, la Asociación de Profesionales y Educadores Parlamentaristas de PR y el Liceo Puertorriqueño de Procedimiento Parlamentario.
Como hemos recomendado en artículos anteriores, al contratar el parlamentarista se debe tener en cuenta su compatibilidad con el estilo de trabajo del presidente y la cultura de la organización. Es importante reunirte con el parlamentarista para evaluar si su estilo es lo que tu organización necesita.
¿Cómo logro que mi organización utilice el procedimiento parlamentario?
Si en las reuniones y asambleas de la organización se han formado problemas de orden o se extienden más allá de lo razonable, es probable que ya se hayan dado cuenta de que hace falta algo. Ese algo es probablemente el procedimiento parlamentario.
La contratación de un parlamentarista, como la de cualquier otro profesional que asiste a la asamblea (abogado, contable, agente de seguros, etc.) es realizada por la presidencia o directiva. Si no perteneces a la directiva, puedes sugerirle a la misma que contacte a un parlamentarista profesional para que tengan una reunión, presenten la situación y evalúen cómo pueden ayudar. También puedes presentar una moción durante una asamblea para que en la siguiente reunión les asista un parlamentarista.
¿Cómo puedo conocer más del procedimiento parlamentario?
Hay toda una serie de libros y autoridades parlamentarias que presentan las reglas y formas de conducirse. En Puerto Rico, las más utilizadas son:
- “Manual de Procedimiento Parlamentario” de Reece B. Bothwell
- “Robert’s Rules of Order”
- “Reglas de Procedimiento Parlamentario” de Milton Rosario Soto
- “Las Asociaciones y Normas Procesales para sus Asambleas Deliberativas” de Dominga Rivera-Rivera
También hay folletos cortos como:
- “Reglas Básicas del Procedimiento Parlamentario” de Evaristo M. Toledo
- “Manual Sencillo de Reglas Parlamentarias” de Carlos E. Carrión
Además, puedes coordinar cursos y talleres para tu organización sobre temas como procedimiento parlamentario, redacción de actas, manejo eficiente de reuniones y planificación estratégica. Ponte en contacto con Soluciones Parlamentarias usando nuestra información de contacto al final de la pagina.